ARTICULO 4

TOMANDO CONSCIENCIA DE NUESTRO CUERPO FÍSICO.

¿En cuántas ocasiones hemos hecho planes para comenzar a realizar actividad fisica con regularidad? Y, ¿Cuántas veces hemos cumplido este propósito con constancia?

Es muy común y, hasta cierto punto; normal, que le demos muy baja importancia a la actividad física, en otras palabras, al ejercicio físico y tengamos muchas prioridades antes que mover nuestro cuerpo, como si esta máquina maravillosa que poseemos no necesitara moverse.

Los seres humanos somos multidimensionales, es decir, que contamos con distintos “cuerpos” o “dimensiones” que nos hacen diferentes del resto de los seres vivos sobre el planeta, estos  “cuerpos”  nos sirven para expresarnos y funcionar en todos los planos de nuestra realidad.

Estos “cuerpos” o “dimensiones” son:

  • Cuerpo mental
  • Cuerpo espiritual
  • Cuerpo emocional
  • Cuerpo energético
  • Cuerpo físico

El cuerpo físico es el más tangible que nos permite tener contacto con el exterior alimentando a nuestro sistema nervioso y el que nos debería de resultar más fácil cuidar y sin embargo; en la mayoría de las personas no es así.

Inmersos en el estrés de la vida  perdemos la consciencia de que debemos cuidar de nuestro cuerpo físico y tangible, procurar  mantenerlo en buen estado de salud no solo con una alimentación sana, sino también con la actividad física que no precisamente implica  asistir a los gimnasios o deportivos de moda o hacer ejercicio excesivo e inconsciente que nos lleve a lastimarnos… va mucho más allá, es mucho más profundo, es conectar nuestro cuerpo físico con la mente, sentir cada movimiento, cada flexión, cada estiramiento… una conexión consciente de  mente y cuerpo…es mantener la salud de este instrumento que nos sostiene sobre la tierra, que nos permite, sentir, desplazarnos, y valernos por nosotros mismos.

¿Resulta tan complicado dedicarle 20 minutos diarios a “lubricar” nuestro cuerpo físico con movimientos suaves y conscientes, a cualquier hora del día? Y esta consciencia de salud, nos la da la práctica de mindfulness, y es entonces, cuando los pretextos pierden fuerza y nos enfocamos en cuidarnos en reconocer que solo TENEMOS UN CUERPO, no hay otro igual y tenemos toda una vida para cuidarlo… toda una vida para practicar mindfulness en nuestra consciencia corporal

Claudia  Muñoz. Instituto Mindfulness de México .  Junio , 2020.